Llegó el 2025 y decidí remodelarlo todo, comenzando por mi sitio web —aunque mi casa  física también se vio afectada por ésta decisión. Para ello decidí eliminar el viejo modelo web en el que presentaba un slider —aburrido— con enlaces a diferentes proyectos, por este sitio dinámico y ciertamente más entretenido.

Y para probarlo decidí iniciar con éste artículo que inaugura, a la vez, una sección de noticias: las crónicas de Nata. Como verán —si es que alguien llega a leer ésto antes de que inaugure el sitio como tal—, todo está en construcción. El portfolio no está siquiera iniciado aún y apenas estoy terminando el home; pero voy a paso seguro.

Toda esta situación me tiene entusiasmado. No es solamente un sitio web, se trata de un habitáculo para todos mis proyectos, una suerte de bati-cueva: la nata-cueva. Pronto les contaré los detalles, los planeas y, por supuesto, los avances.